La ley mordaza en el Alvaro Cunqueiro, o la irresponsabilidad de un gerente

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Lo importante no es hacer bien las cosas. Lo importante es ocultar a la sociedad que se hacen mal

Según declaraciones aparecidas en La Voz de Galicia: El gerente, Sr. Rubial, sería partidario de que en caso de subir a un avión cuyo piloto fuese borracho, o cuyas puertas no cerrasen, las azafatas deberían ocultarlo, poniendo así en riesgo a todo el mundo

Para Rubial, hay que separar dos aspectos: uno es que se colocan carteles en cualquier sitio del hospital, «non e desexable e incomódame, pero non atenta contra nada»; otro es el contenido de los mensajes que crean alarma. Pone un ejemplo: ¿qué ocurriría si al acceder a un avión las azafatas avisasen a los pasajeros de que las puertas no cierran bien o que el piloto lleva dos copas?

Amordazados en el Cunqueiro

«¿Es usted señor Rubial una marioneta en manos de la concesionaria? Pues nosotros no, y no van a pisotear nuestros derechos». Este es uno de los carteles que los trabajadores del Hospital Álvaro Cunqueiro colocaron este miércoles en uno de los despachos del centro médico.

Con mascarillas y gritando consignas contra la «Ley Mordaza» que el gerente del área sanitaria de Vigo, Félix Rubial, pretende instaurar en el centro. Los trabajadores del Álvaro Cunqueiro llevaron a cabo este miércoles una sentada en respuesta a la carta interna enviada la semana pasada a todos los jefes de servicio y unidad, supervisores y jefes de personal subalterno, tal y como adelantó VIGOÉ.
En el escrito, Rubial advertía de que procedería a la retirada de carteles y «mensajes alertando de deficiencias» y amenazaba con sanciones para los funcionarios o responsables de las unidades en las que se expongan.

El escrito continuaba advirtiendo de que queda prohibido de ahora en adelante exponer carteles alusivos al mal funcionamiento del centro médico. «Por tratarse dunha información que claramente induce ao temor, alarme e desconfianza entre os usuarios e familiares sobre a asistencia sanitaria que se presta neste centro, e que así mesmo pode vulnerar o dereito da debida protección da saúde que debe ser garantizada por lei, procederase a retirada inmediata dos mesmos», añadía Rubial en la carta.

La respuesta no se ha hecho esperar. «En este hospital no permitimos ni nos da miedo la Ley Mordaza, cuídense ustedes, la rabia es mucha», advertía otro de los carteles pegados este miércoles en la puerta de un despacho del Cunqueiro.

Las movilizaciones convocadas por la junta de personal del Chuvi se realizaron a las 11.00 horas en el Álvaro Cunqueiro y a las 13.00 horas en el Meixoeiro y en ellas participaron varias decenas de trabajadores. Denuncian que la Gerencia pretende censurar la libertad de expresión para acallar las críticas derivadas de la carencia de personal y de los problemas de gestión.

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