Y así nos va…

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La independencia de los funcionarios es la garantía de los servicios públicos

 

En una Mesa Sanitaria celebrada el pasado viernes 13 de mayo el Director General de Asistencia Sanitaria del SERGAS, Dr. Jorge Aboal, defendió que los gerentes deben ser nombrados y cesados con criterios políticos.

Cada cambio de color político, de conselleiro, o incluso, por lo que se deduce de sus palabras, cada cambio en la Dirección General, debe llevar aparejado un cambio en las direcciones de todas las gerencias que dirigen los hospitales y los centros de salud.

Y es preferible que el gerente desconozca el hospital, puesto que no debería trabajar en él.

Defiende el Dr. Aboal la lealtad  política por encima de la lealtad institucional, o confunde lealtad a la institución y lealtad al partido gobernante de turno.

Al parecer es imposible ser leal al SERGAS y no pertenecer o simpatizar con un partido concreto.

Como no podía ser menos, esta postura también fue defendida por el representante del PSOE.

Mientras la sociedad demanda mantener nuestra Sanidad Pública al margen de la lucha política, mientras  exige consensos amplios en Sanidad, Educación y Justicia, sobre como entender y defender los pilares de nuestro estado de bienestar, de nuestro estado social, nuestros políticos, de cualquier color,  nos dejan claro que el que entre deshará lo que otro haga.

Que su primera prioridad a la hora de utilizar los recursos, escasos, será desmontar lo que otros hayan montado.

La gestión de los servicios sanitarios no se valorará en función de la capacidad de sus gerentes ni de otros resultados que la lealtad al que manda, sea el que sea.

Y aún se preguntarán por qué la sociedad no confía en sus políticos.

Con la Sanidad, con la Salud no se juega.

O no se debería jugar.